a lo lejos


Igual estoy delirando. Pero me dejo andar con los pelos al viento, soñando, soñando, soñando. Galopar sin rumbo con el viento y mi caballo. Aunque, en el fondo, yo siento que soy ese caballo. En un atardecer teñido de verde, con reminiscencias de lluvia, el sol cae sin que nadie se atreva a impedírselo. Él, como amo indiscutible de nuestro universo, decide alumbrar por última vez los esfuerzos quijotescos por volar alocadamente al ritmo de ese mismo viento. Son los viejos molinos que me traen el recuerdo de aquello que fuimos y aquello hacia lo que vamos.

Comentarios

PaulGladis ha dicho que…
Welcome back! Que poesia tienes dentro. Espero leer más.

(Por cierto: Happy Birthday [belated!])
María Fernanda Bouza ha dicho que…
Gracias!!!! que bien, alguien que me lee!!! jjajajajajjaajajaa

Feliz Cumple tu tambien, y muuucho mas tarde!!!!

:(
Rupert ha dicho que…
La inspiración volvio a sus labios. Que la retuvo tanto tiempo oculta en la cueva del silencio mientras las noches pasaban y esa parte oculta esquivaba la luz, día tras día...la mezcla de sensaciones, sentimientos, esa manera intensa de vivir, sentir, disfrutar que a veces sube y a veces baja, sin control, sin rumbo; aunque la sonrisa y la belleza siempre estan ahí, su brillo cambia con las tormentas que asoman de repente y bloquean de forma eléctrica su mirada.
Habrá un tiempo en el que la luz ilumine desde dentro todo lo que quedó atrapado, para que encuentre el camino hacia su libertad.

Saber vivir sin prisa es una manera de ser rico.

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