Vilma

Blanco, marrón, gris y una marca negra en la nariz. La luz la alumbra mientras a mi lado se duerme. Parece que sueña con el cantar de los pájaros, el juego del hipopótamo rosa o alguna tímida mariposa. Disfruto tenerte, tu cariño lo presiento, tu alegría al verme me enternece y mi felicidad al encontrarte me consuela. Eres un manojo de pelos, un peluche que se mueve, te encanta que te acaricie, así como a mí, que me mires. ¿Ronroneas? Sí, y mi alma se llena al saber que sí, que me esperas.

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