Lejos

Pequeñita... por dentro soy así de pequeñita. Al salir pienso que soy capaz pero me quedo, un día, otro día, un mes, un año... y, así, va pasando el tiempo. No llego a ningún sitio. La meta la veo lejos. Los días, iguales. Tu sigues ahí y yo, me pierdo.
Me quiero ir pero no. Y creo que la razón eres tú, tu no sonrisa, tu lejanía, lo que creo que son tus excusas, tu mirada de costado. Si insisto, te encuentro pero, si te encuentro, entonces más te pierdo. Hay una línea, un rencor escondido que sale apenas lo dejas. Esto debería acabar ya... ¿ya? Es que no me animo, parece que me quiero ir pero no.
las palabras retumban en mi cabeza vacía. No hay nada, no hay ideas, no hay sueños, no hay porqués ni paraqués, solo un estar diario, pasando. Una película, una ventana, un jacinto marchito, las rosas que pierden su brillo y que, aún así, luchan por mantenerse en pie. Y yo las miro, y se me hace inevitable rellenar mi cabeza vacía con un miedo vano por no encontrar ese sentido que me complete, que me lleve sin tener que moverme, que me despierte. Sigo esperando, porque buscarte no tiene sentido: no sé ni dónde, ni cuándo, ni cómo.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Decido que el amor
sea un contrapunto
doble.
Lumbre de un solo hogar,
fuego que amenaza la extinción.

Decides que hable la duda,
decides que hable la ceniza.

Entremedias,
tantos días de amor desperdiciados.
Anónimo ha dicho que…
¡Qué extraño es vagar en la niebla!
En soledad piedras y sotos.
No ve el árbol los otros árboles.
Cada uno está solo.

Lleno estaba el mundo de amigos
cuando aún mi cielo era hermoso.
Al caer ahora la niebla
los ha borrado a todos.

¡Qué extraño es vagar en la niebla!
Ningún hombre conoce al otro.
Vida y soledad se confunden.
Cada uno está solo.

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